Yo también creo que buscaban sinceramente la verdad, y en muchos casos acertaron, aunque no siempre. En cuanto a si la Iglesia Católica acepta o no la filosofía de Platón y de Aristóteles, acepta lo que tienen de acertado (que no es poco) y deja de lado lo demás, siguiendo el sabio consejo de San Pablo de examinarlo todo, desechar lo malo y retener lo bueno. El mismo Aristóteles ya decía aquello de Amicus Plato sed magis amica veritas. Platón es mi amigo, pero la Verdad es mejor amiga. Como tú mismo dices, Aliocha, San Agustín y Santo Tomás de Aquino tomaron mucho de ellos. Gracias a la Iglesia tenemos lo que había de bueno en la antigüedad, depurado del paganismo y de ideas erróneas.
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