Voy a intentar intervenir sin apasionamiento ni molestar a nadie. Yo creo que la única ventaja de que la extrema izquierda vaya alcanzando cotas de poder no son precisamente los beneficios directos que de ello se puedan obtener (pues no creo que esta gente sea capaz de solucionar nada) sino los indirectos: generar una sana reacción en el adormecido pueblo español en la línea que apuntaba Martin Ant. Si nuestra perspectiva no es esa, sino que tratamos de frenar esa sana y lógica reacción diciendo que en realidad no son tan malos, y dejamos que precisamente los culpables del ascenso de la extrema izquierda canalicen dicha reacción, estamos desaprovechando, según mi entender, lo único bueno de la situación.