Re: Ataque a "Charlie Hebdo"
En una justa aplicación de la libertad de expresión que reclama toda esta gentuza (vocablo que uso en nombre de MI libertad de expresión), considero que en lo sucesivo cada uno de nosotros en justa correspondencia, tenemos el mismo derecho, el de nuestra libertad de expresión, para ciscarnos en toda la parentela de esta gentuza, en ellos mismos, en su cara, en sus modales o en las pintas con las que aparecen en público. Estoy convencido de que dicha medida, en cualquier red social que se utilice como medio de transmisión de la libertad de expresión de cada cual, sin duda, contribuirá a una mayor y más implantada democracia.
Me pregunto si los señores obispos de este país con el concurso del Señor Urdaci van a tener los bemoles de reproducir en la cadena 13 Televisión la portada de Charlie Hebdo en la que la Santísima Trinidad se sodomiza a sí misma. Y al tiempo que muestren dicha mierda moral el señor Urdaci debería repetir su editorial.
¿Libertad de expresión sin límites? ¡¡¡ NO, GRACIAS !!!
"He ahí la tragedia. Europa hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma europea choca con una realidad artificial anticristiana. El europeo se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.
<<He ahí la tragedia. España hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma española choca con una realidad artificial anticristiana. El español se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.>>
Hemos superado el racionalismo, frío y estéril, por el tormentoso irracionalismo y han caído por tierra los tres grandes dogmas de un insobornable europeísmo: las eternas verdades del cristianismo, los valores morales del humanismo y la potencialidad histórica de la cultura europea, es decir, de la cultura, pues hoy por hoy no existe más cultura que la nuestra.
Ante tamaña destrucción quedan libres las fuerzas irracionales del instinto y del bruto deseo. El terreno está preparado para que germinen los misticismos comunitarios, los colectivismos de cualquier signo, irrefrenable tentación para el desilusionado europeo."
En la hora crepuscular de Europa José Mª Alejandro, S.J. Colec. "Historia y Filosofía de la Ciencia". ESPASA CALPE, Madrid 1958, pág., 47
Nada sin Dios
Marcadores