Esto forma parte, me parece a mí, de esa nueva corriente histórica que se dedica a revisar a ciertos personajes de la Historia, como pasa, por ejemplo, en los USA con el general Custer, que hasta hace 40 años era el héroe yanki por excelencia y que ahora lo tienen por un villano, lo tildan de loco y asesino (cosa que no va mal encaminada)¿No pasa un fenómeno parecido en Argentina?

Decir, por otra parte, y aclaro, que no son comparables ambos personajes históricos, el Cid y Custer, Custer en mi opinión no le llegaría ni la altura de los zapatos al Cid.

También es frecuente que los nacionalistas periféricos en España se dedican a vilipendiar a los personajes que se han distinguido en la formación de España durante el transcurso de los siglos, como el caso que tratamos aquí del Cid, otros podrían ser los Reyes Católicos. Para estas gentes estos personajes no eran más que "malvados fanáticos españolistas”. Yo concretamente recuerdo a un gallego, nacionalista, denigrar la figura del Cid en un foro de historia hace unos años.

Ah, pero en cambio no se te ocurra tocar a los suyos, sobre todo si son adalides de su nacionalismo, como Sabino Arana en el caso vasco, LLuis Compains en el catalán o Blas Infante en el andaluz. En este último caso se monto una buena en Andalucía hace poco, sobre todo en los partidos de izquierda, porque uno del PP, creo recordar, criticó a ese “pollo pera” (por llamarlo algo fino).

En pocas palabras, al Cid le puedes poner a bajar de un burro, que decimos en España, que no pasa nada, pero ojo con meterte con el muladí inventor del nacionalismo andaluz, te puede caer una “excomunión laica”.