LA ISABELINA... Sociedad Secreta liberal formada por Aviraneta.
Aviraneta, el intrigante que, a la luz de su "Memoria..." y de Pío Baroja, malquistó a Maroto con D. Carlos V, es un personaje sorprendente. Nunca dejó de crear sociedades secretas para impulsar desde la clandestinidad su acción política. En 1833 se sabe que está en Irún, tras un periplo por Hispanoamérica.
Funda en Madrid por aquellas fechas una sociedad secreta a la que denominará LA ISABELINA.
La intención de LA ISABELINA no era otra que la de reclutar a diez mil ciudadanos madrileños, con el propósito de adueñarse de Madrid en caso de que prosperaran los movimientos que en la Corte estaban ejecutando los apostólicos de Calomarde.
Perfectamente todo estudiado, a su orden los mil ciudadanos vinculados a La Isabelina tendrían que ocupar los puntos neurálgicos de la Corte y Villa de Madrid, colapsar las calles levantando barricadas y coordinados con un grupo de soldados bajo el mando de Palafox... Hasta establecer un gobierno revolucionario.
Entre los figurones que se barajaban para ocupar ese gobierno se perfilaban como Secretario de Estado Evaristo Pérez de Castro, y se contaba también con Jerónimo Valdés, el Duque de Rivas, el comunero Flórez-Estrada...
El Golpe de Estado no había tenido hasta ese entonces ningún teórico. Tuvo que venir Aviraneta para planificar el primero de la historia española, aunque no pudo consumarlo y terminó en la cárcel con su compinche Palafox, con el comunero Romero Alpuente, Olavarría, el dramaturgo y poeta Espronceda (miembro de la también Sociedad Secreta Numantina), Villalta y otros.
¿Cómo salió de prisión?
El felón Aviraneta alegó que todo el golpe de Estado lo había planeado él solo, excusando a todos sus compañeros de cautiverio mencionados. De ese modo le fue fácil alegar que "una conspiración reducida a un solo individuo no podía ser conspiración"... Muy sutil y muy maniobrero, este auténtico maestro de la mentira fue puesto en libertad merced a la debilidad del gobierno que, sin que podamos dudarlo, simpatizaba con el conspirador.
Sobre "La Isabelina" el mismo Aviraneta, amigo de darse bombo y platillo, publicó en Burdeos un folleto explicativo allá por 1834, en este panfleto confiesa que la sociedad secreta así llamada estaba inspirada en el Carbonarismo y alegaba que los hombres que la componían no eran otra cosa que "defensores de la inocencia" de la niña Isabel que reinaría, para castigo de nuestros pecados, con el nombre de Isabel II de infeliz memoria.
Un personaje la mar de curioso que merece nuestra atención y al que podemos seguirle los pasos en la obra de Pío Baroja, "Aviraneta o la vida de un conspirador"... Digna de encomio y, aunque novelada, muy bien documentada historiográficamente.
Un saludo, hermanos de la Sociedad Secreta Religio est Libertas... Nadie se asuste, es católica y contrarrevolucionaria, y me la acabo de inventar... Una broma, entre tanta austeridad.
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