Yo diría, que ese populacho jenízaro está hoy alentado por derviches giróvagos; en el fondo, no nos diferenciamos mucho de los turcos jajajjajaja. Menuda jarfia somos a veces.

Ay, si toda esa mala baba y ese afán de medrar la utilizáramos para el bien, aunque sólo fuera de vez en cuando como antes; el mundo sería otro.