Claro, hermano Alaricos: el caso es que en Argentina, los españoles que llegaban se unían en matrimonio a compatriotas que habían llegado junto con ellos, o con españoles llegados unos años antes, o con argentinos bisnietos, nietos o hijos de españoles, con lo cual la sangre( y con ello todo lo que conlleva) está intacta.
No es el caso de los países que me nombras, donde habrás de hallar mulatos, mestizos, negros, blancos, producto de uniones diversas. Con lo que, por ejemplo, un mulato (hijo de un español, y una mujer de raza negra) poco y nada identificado con España puede sentirse.
Marcadores