1º. Una crítica constructiva requiere, si o si, una propuesta alternativa coherente, no tirar por el suelo por tirar.
¿Propuesta alternativa? ¿Como por ejemplo la que lleva realizando la Comunión durante 181 años? La Revolución ya ha mostrado todas sus caras: el liberalismo isabelino; el caos anarquista del Sexenio Revolucionario; el conservadurismo alfonsino; el masonismo de la II República; el nazifascismo de la primera etapa franquista y el tecnocratismo de la segunda etapa franquista; la democracia actual juancarlista.

¡La Revolución ya lo ha probado todo en estos 181 años! ¿No será la hora ya de volver a los principios de la tradición político-social española que viene predicando la Comunión en estos 181 años, principios regados con ríos de sangre y persecución de todos esos regímenes revolucionarios de estos últimos 181 años, incluido el franquista?