Re: El curiosity podría haber encontrado vida en Marte

Iniciado por
D. Fco. de Bobadilla
El Azar.... claro lo que ellos llaman azar yo lo llamo Voluntad Divina. Incluso los más reputados astrofísicos, al llegar al estado anterior al big-bang no saben explicar, sino como azar, el impulso que origina el origen del Universo -suena a redundancia pero lo concibo como momentos distintos-. Lo que quiero decir es que todos los misterios serán revelados pero, hoy por hoy, ni ellos pueden asegurar que provocó esa primera explosión y, como en otras tantas cosas, hablan de azar. Pues ahí es donde está la Causa Primera. Ellos lo llaman azar, yo Dios.
Tal vez no sea la más magistral de las explicaciones pero supongo que entendéis mi exposición.
Saludos
FB
Si que te entiendo, aunque yo hago más distinciones entre Dios y las ideas como, por ejemplo, que el azar sea sólo un recurso en determinadas circunstancias. Y ello sin menoscabo de que se le pueda encontrar la contingencia previa. Pienso que llegar a la Causa Primera es mucho más complejo, imposible salvo por que no quede otra alternativa que la del misterio y la aceptación de que algo sólo pueda proceder de Dios directamente.
La creación, la nada y el azar
"He ahí la tragedia. Europa hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma europea choca con una realidad artificial anticristiana. El europeo se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.
<<He ahí la tragedia. España hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma española choca con una realidad artificial anticristiana. El español se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.>>
Hemos superado el racionalismo, frío y estéril, por el tormentoso irracionalismo y han caído por tierra los tres grandes dogmas de un insobornable europeísmo: las eternas verdades del cristianismo, los valores morales del humanismo y la potencialidad histórica de la cultura europea, es decir, de la cultura, pues hoy por hoy no existe más cultura que la nuestra.
Ante tamaña destrucción quedan libres las fuerzas irracionales del instinto y del bruto deseo. El terreno está preparado para que germinen los misticismos comunitarios, los colectivismos de cualquier signo, irrefrenable tentación para el desilusionado europeo."
En la hora crepuscular de Europa José Mª Alejandro, S.J. Colec. "Historia y Filosofía de la Ciencia". ESPASA CALPE, Madrid 1958, pág., 47
Nada sin Dios
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