Sigo sin entender qué tiene que ver eso para reconocer o no la figura de la monarquía; aun ausente, o inexistente a día de hoy. Que la sociedad haya caído en picado no creo que nos deba dar pie a abandonarnos a negar todos los símbolos que formaron lo que somos y que sin ellos nada queda. Nos miramos y vemos que no somos lo que deberíamos ser, bien, ¿Pero eso justifica que renunciemos o allanemos todo a nuestro paso? ¿Debemos conformarnos con vivir en una comuna horizontal, sin Dios ni amo donde la gente se "moviliza"? La autocrítica no significa destruirlo todo, y tampoco ofender así las simbologías y estamentos. Sobre todo cuando se está hablando de forma abstracta. Yo, desde luego, prefiero no ser nada a ser algo sin orden.
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