Re: Inaudito: ¡Indigenismo anti-católico y anti-español en Uruguay!

Iniciado por
Alejandro Farnesio
¿No hay nada que festejar? Esto mismo he leído de amigos españoles en facebook. Que ellos no tienen nada que festejar, porque no fue un descubrimiento, sino una invasión y saqueo del oro americano a cambio de entregarles la fe católica. Si entre los propios españoles hay ese sentimiento, no me extraña nada que haya un sentimiento parecido en América.
Además, argumentan que en América ya había una cultura antes de la llegada de los españoles.
¡VIVA ESPAÑA! ¡VIVA CRISTO REY! ¡VIVA LA HISPANIDAD!
Yo empezarïa por decir a esos amigos que un poco más de sentido común, menos ignorancia que para eso estamos dedicando tantos fondos en educación y menos imbecilidad mental así como un centrifugado cerebral para sacudirse la mierda de propaganda que les han incrustado en el córtex, no les vendría nada mal.
Pues claro que fue un descubrimiento, que por su naturaleza excepcional fue denominado Descubrimiento con mayúscula, pues la existencia del continente americano no figuraba en ningún mapa de la época, a no ser que tus amigos sean los clásicos partidarios de la conspiración ufológica y hablen del "imaginario" mapa de Piri Reiss. Luego, repito, el continente americano no figuraba en ningún mapa.
En segundo lugar, en vez de estar diciendo paridas sin cuento ni base, en ese sitio de expresión de profundos y sublimes pensamientos que es Facebook, les resultaría mucho más útil a sus escasos conocimientos de su propia inanidad, la lectura del Diario de abordo de Colón que está publicado y se puede adquirir en librerías. Y tampoco estaría de más que leyesen las dos cartas que han sobrevivido, una al escribano de ración del Reino de Aragón, Luis de Santángel, y otra al tesorero también de Aragón, Gabriel Sánchez. En uno de dichos textos publicado por el editor de Barcelona Pedro Posa en abril de 1493, lleva la fecha de 15 de febrero y un anima o postscrptum de 14 de marzo 1493, en el que habla específicamente de "descubrimiento", lo que viene a desmentir la simple posibilidad de que usase algún fantasioso mapa en el que estuviese representada América. De modo que fue descubrimiento y una gran sorpresa, negarlo es propio de mentes débiles, escasamente instruidas, y fuertemente alienadas por la propaganda política anti-católica y anti-española.
Que hubo penetración, exploración y toma de oro (no tienen otro argumento) es lógico, pero deberían decir que el oro no tenía el mismo valor simbólico que en Europa, Cercano Oriente y Asia. Y, también deberían ser capaces de entender que en América no había una cultura sino un enorme número de ellas, que en ocasiones coexistían entre ellas y en otras unas sometían a las demás. Si supieran un mínimo de Historia de América sabrían que, lamentablemente, se dieron casos hasta de exterminios de naciones enemigas, al igual que en todas las partes del mundo.
Y si sus cerebros tuviesen la más elemental y básica formación, serían capaces de entender que no se pueden juzgar los acontecimientos sucedidos hace siglos con la estrechez mental de hoy en día. Y, finalmente, si celebramos estos acontecimientos es porque nos da la real gana y tenemos el derecho a ello, tanto si les gusta como si les sienta como una patada en la entrepierna, que ya estamos hasta el moño de tanto traidor y renegado. Si no les gusta España y su Historia, ya saben lo que han de hacer: las maletitas y ¡hala! a la frontera más cercana, que están todas abiertas, y que no se olviden de dejar aquí el DNI, que allá donde vayan les darán un nuevo pasaporte.
Última edición por Valmadian; 13/10/2012 a las 18:26
"He ahí la tragedia. Europa hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma europea choca con una realidad artificial anticristiana. El europeo se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.
<<He ahí la tragedia. España hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma española choca con una realidad artificial anticristiana. El español se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.>>
Hemos superado el racionalismo, frío y estéril, por el tormentoso irracionalismo y han caído por tierra los tres grandes dogmas de un insobornable europeísmo: las eternas verdades del cristianismo, los valores morales del humanismo y la potencialidad histórica de la cultura europea, es decir, de la cultura, pues hoy por hoy no existe más cultura que la nuestra.
Ante tamaña destrucción quedan libres las fuerzas irracionales del instinto y del bruto deseo. El terreno está preparado para que germinen los misticismos comunitarios, los colectivismos de cualquier signo, irrefrenable tentación para el desilusionado europeo."
En la hora crepuscular de Europa José Mª Alejandro, S.J. Colec. "Historia y Filosofía de la Ciencia". ESPASA CALPE, Madrid 1958, pág., 47
Nada sin Dios
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