Jasarhez. El hilo simplemente tenía como objetivo subrayar el carácter no tradicionalista, desde el punto de vista político, del régimen franquista (en su varias y evolutivas formulaciones y aplicaciones constitucionales).

Obviamente esto no quiere decir que fuera falangista (o fascista, como ladran los actuales historiadores izquierdistas), sino que, como usted bien señala y yo suscribo, Franco simplemente fue franquista y punto. Se podría discutir si el pragmatismo tecnocrático se puede considerar también como una ideología (yo, siguiendo en esto a D. Juan Vallet de Goytisolo que estudió a fondo el tema, afirmo que sí) o, por el contrario, como una ausencia de ideología (tesis de Gonzalo Fenández de la Mora).

Al decir que el régimen franquista objetivamente no fue políticamente tradicionalista, tampoco he querido decir que los sucesivos gobiernos de dicho régimen hicieran una buena o mala política respecto al bien común de los españoles en política interior, política internacional, política religiosa, política económico-social, política educativa y cultural, etc... (no entro en ese tema en este hilo). Yo simplemente afirmo (siguiendo en esto, no sólo a los tradicionalistas no-franquistas, sino también a Blas Piñar y su crítica de oposición constructiva de las décadas de los ´60 y ´70) que dichos gobiernos siguieron, en líneas generales, una política mala para los españoles en todos los aspectos.

Por último, sobre la posible conciliación entre la doctrina tradicionalista y la doctrina falangista-nacionalsindicalista, simplemente señalar que se trata de un imposible (o cuadratura del círculo, como usted dice): o se es, en política, tradicionalista o falangista-nacionalsindicalista, pero no las dos cosas al mismo tiempo. En el prefranquismo, que yo sepa (que me corrija alguien si no es así), el único que intentó la conciliación entre ambas doctrinas políticas fue Víctor Pradera. En el franquismo y el posfranquismo el único que ha tratado (y sigue tratando) de defender dicha conciliación es Blas Piñar y su grupo cultural Fuerza Nueva.