¿Y este Thomas Montgomery quién es, aparte de ser muy conocido en su casa a las horas de las comidas? Pero aparte de este hecho, es decir, de que no sabemos ni quien es, que expresa lo que a él en su libérrima interpretación personal y particular le da la gana interpretar a su modo subjetivo y aire liberal, también se me ocurre
algo más: es de buena educación, es signo de respeto hacia los demás, no colgar ladrillos ilegibles a causa de una letra espesa, densa, sin que se puedan separar los párrafos y, por ello, las ideas, es decir, la línea argumental.