Hola a todos.

Aunque por lo que leo, el tema lleva abierto largo tiempo, no me resisto a hacer algún comentario. Creo que -y me parece que algunas de las intervenciones de Valmadian apuntan en ese sentido- se abusa mucho, demasiado del término "mitología", -un término poderoso y evocador ¡qué duda cabe!-, a la hora de aplicarlo a lo que a mi juicio no es sino folklore. En el caso de España, creo que hablar de "mitología" asturiana, vasca, castellana, gallega, etc. es inapropiado. Personajes del folklore, Xanas, Mouros, Lamiak, Martinillos, Trasgus, etc., de los cuentos populares, de origen incierto (¡incluso puede que originalmente mitológico!) no son mitología. Y si lo fueron alguna vez, ya no pueden serlo porque su sentido se nos ha perdido, se ha diluido y lo que nos quedan son sólo restos de los que no podemos saber ya ni su origen ni su cometido y función original.
Para entendernos, y con el ejemplo del caso irlandés, creo que no se puede ni se debe poner en el mismo nivel a los Leprechauns y Cluricauns irlandeses, y a Lugh, Dagda o Cú Chullain.
Aunque no por ello, pues como alguien ha apuntado, existen testimonios de deidades, hay que negar que haya habido en algún momento una mitología, más bien mitologías, en la Hispania prerromana.

Y, por supuesto, hay que animar a Josean Figueroa en su empresa. Todo lo que sea elogio y alabanza de la Hispanidad, sea desde el punto de vista que sea, incluido el de la creación de una obra literaria fantástica, creo que es positivo.

Saludos.