Aquí en Perú se usa "sapo", pero no con el significado de delator. Se usa, más bien, como sinónimo de mirón o fisgón, y en general, para hacer referencia a alguien excesivamente curioso o aún impertinente. De ahí que también existe el verbo "sapear", como equivalente a espiar, atisbar, fisgonear o curiosear. También se usa "sapo" como equivalente a astuto o espabilado.
Por otro lado, también se utiliza la expresión "tragarse un sapo" cuando alguien hace algo para él desagradable o que no deseaba hacer. Es un uso muy parecido al que describe Erasmus, aunque en Perú no se limita al ámbito político (también se puede decir que "tal amigo mío tuvo que tragarse el sapo", por ejemplo).
Marcadores