Por mi parte, de momento no le podría responder con precisión.
Mas, podría decirle que José Artigas estudió en un colegio católico, y desde el catolicismo siempre se ha destacado esa matriz para, de alguna manera, hacerlo suyo. Igualmente, en su vida privada no se comportó como un verdadero católico, y en la pública tampoco, pues se sublevó de España y tuvieron sus propuestas clara influencia republicana y liberal.
Lo que sí podía destacar respecto a lo último, y es algo de lo que también se hacen gala los católicos de mi país, es el Reglamento de Tierras de 1815, en donde "los más infelices serán los más privilegiados": el programa consistía en la dación de una "suerte de estancia", es decir, una pequeña porción de tierra, en un orden de prelación en donde los primeros serían los más pobres, bajo condición de que la trabajaran.
Personalmente, siempre he admirado dicho plan, que tiene clara influencia católica, aunque vale decir que muy pronto dejó de funcionar.
Finalmente, y en otro orden, aunque referente al tema, cabe decir que el clero uruguayo, también de manera sorpresiva -siguiendo la línea de la sorpresa a que me referí en mi anterior intervención- en los años posteriores a la independencia siempre defendió el nacionalismo uruguayo, sosteniendo que el nacionalismo es una virtud cristiana, y acotando que muchos de los que participaron en la independencia eran católicos.
Dicho esto, de paso viene el agradecimiento a Hyeronimus, quien con su explicación aclaró un poco la cuestión: no son excluyentes la fe católica y el liberalismo masónico procedente de Inglaterra, que profesaron los independistas.
Claro está que para ellos no son excluyentes, de manera más que errada, puesto que tales principios sí lo son. Si lo serán!
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