CONSIDERACIONES SOBRE EL VOXISMO

A todos ha afectado la irrupción de VOX en la política institucional andaluza, y dadas las consecuencias que está teniendo decidí tomar la pluma y plasmar estas consideraciones. Es cierto que hemos escuchado opiniones de todo tipo: ultraderecha, fascismo, alternativa católica… pues bien, veamos pues a VOX desde un prisma tradicional y sobre ello construiremos nuestras conjeturas.
Primeramente, para evaluar a esta formación es preciso saber qué son. VOX surge como una formación derechista desengañada con el rumbo del PP, por tanto, comparten naturaleza. El fin de un ente viene condicionado por su naturaleza, luego VOX y PP comparten fin (aunque quizás de forma inconsciente). Si comparten naturaleza, el análisis de uno nos dará grandes pistas sobre el otro. Ambos son partidos derechistas, entroncados en el liberalismo (pues se declaran constitucionales ambos). Ello los coloca en la visión política tradicional como liberal-conservadores, o conservadores a secas. ¿Y qué diferencias encontramos entre el conservadurismo y el tradicionalismo? Fundamentalmente, diferencias esenciales, pues la Tradición vendría a conservar aquello que favorece al desarrollo natural del hombre (el sano progreso1), y el conservadurismo lo conserva todo (bueno y malo). Y dado que vivimos en un sistema revolucionario, todo conservadurismo vendría a conservar la revolución. Así, siguiendo a Balmes, podríamos decir que los liberal-progresistas progresan hacia la Revolución, y los conservadores conservan dichos ‘progresos’. Esto es constatable analizando la historia política desde la Transición. En un panorama en el cual los grupos conservadores veían en la UCD su principal defensor, cuando esta parecía desintegrarse surge un partido, AP, que viene a recoger elementos de la derecha más clásica y por ello fue denominada como una derecha más fuerte en la época. Así, AP aglutinó a la derecha desencantada con la UCD. Pero dadas sus convicciones conservadoras, fue conservando los ‘progresos’ revolucionarios (aborto, divorcio, ideología de género…) hasta dar lugar al PP como lo conocemos hoy. Ahora esa derecha desencantada, encuentra un nuevo paladín, una nueva AP: VOX. Pero ya vimos el devenir de la naturaleza conservadora, y VOX (por salir del mismo PP) comparte su esencia. De tal modo que, en unos años, la derecha llorona necesitará otro paladín de sus aspiraciones. Como podemos ver, VOX no viene a solucionar nada, sino a afianzar el sistema que padecemos.
Quisiera detenerme ahora en una segunda consideración que estimo muy oportuna, VOX como alternativa católica. Si tuviéramos la dicha de pertenecer a una comunidad íntegramente católica bastaría con citar la obra de Sardá y Salvanny, El liberalismo es pecado, mostrar el liberalismo de VOX y asunto resuelto. Pero me temo que el problema se presenta más complicado cuando la jerarquía eclesiástica mira con connivencia al sistema liberal2. Por ello, analicemos los elementos católicos voxistas: supresión del aborto, ataque al feminismo, ataque a la ideología de género… nótese que estos son elementos accidentales de un partido político, no sustanciales. Quiero decir, no estamos hablando de aquello que constituye la esencia de un partido circunstancial, sino que esa misma esencia es el parlamentarismo conservador, incompatible con la doctrina católica3. Es decir, para un partido liberal las pautas de su programa son anzuelo para captar votantes de los cuales se nutre (pautas que si ven que no son atractivas cambiarán de inmediato). Es por ello claro que no estamos votando un referéndum contra el aborto, sino otorgando poder a un liberalismo conservador para suprimir el aborto, que es muy distinto. Por tanto, VOX no es una alternativa católica debido a su esencia liberal.
A continuación, quisiera analizar a VOX desde el prisma tradicional político. Una de sus características principales es el centralismo estatal. Pues bien, nada hay más diametralmente opuesto al tradicionalismo hispánico que dicha medida. Ese centralismo es un fruto de la modernidad claro, plasmado en las medidas de los liberales moderados del siglo XIX. Lo cual confirma la vinculación al liberalismo conservador de VOX. La Tradición hispánica ha sido siempre regional, la Monarquía Hispánica estaba compuesta por las Españas, un conjunto de reinos que compartían monarcas, pero cuyas peculiaridades eran no sólo toleradas sino fomentadas. Por tanto, el centralismo de VOX es opuesto a toda la esencia de nuestra Patria. Existen otros elementos como el constitucionalismo, la reducción de la participación política al sufragio… que no precisan análisis desde la Tradición pues su oposición a la misma es cristalina.
Es por ello, que animo a los que de verdad pretenden restaurar la Tradición que se suban al verdadero tren, al tren del tradicionalismo hispánico. No se dejen engañar por trenes que, a pesar de su corta velocidad respecto a otros, se dirigen al mismo destino que los anteriores.
Francisco Sandoval
1VÁZQUEZ DE MELLA, J.: Textos de doctrina política, Madrid, 1953, cap. II.
2Véase Nota de los Obispos de las Diócesis de Andalucía, 30/11/2018.
3LEÓN XIII, Libertas praestantissimum, 1888.
https://circulohispalense.wordpress.com/2018/12/05/consideraciones-sobre-el-voxismo/
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