Para "conmemorar" la festividad ese tal Joan Tardá de ERC, ha vociferado cosas como "Muerte al Borbón", y ha presenciado como su horda llevaba a la pobre "Nicolasa" metidita en un ataúd, como si del entierro de la sardina se tratase y luego le pegaban el fuego purificador.

Tales actos civilizados y civilizatorios, en cualquier país "ídem" hubieran dado con los huesos de tales energúmenos en la cárcel, que están para algo más que para encerrar a violadores, terroristas o traficantes.

Escalofríos me dan sólo pensar si en vez de semejantes trogloditas , demócratas eso sí, los autores de tales fechorías hubieran sido los "ultras franquistas".

¡Qué país! , ¡qué náusea! y pensar que ese fulano del tal Tardá cobra un sueldazo a costa de los contribuyentes mientras que cada vez hay más gente que no sabe si podrán siquiera celebrar la Navidad. Y en cuanto a la banda de sus pan troglodites seguramente fueron pagados, como suele ser ya costumbre entre toda esta chusma de los estercoleros sociales.

El incidente dice todo del régimen.