Re: Nada, Creación e Infinitud
Bueno, todavía no he tenido la ocasión de ver todo el debate, las dos partes completas. Pero de lo que señalas en tu respuesta hay dos aspectos a comentar: el primero es relativo a la forma en el "cómo" crea Dios a partir de "la Nada", que en el # 33 ya apunto a una forma factible de hacerlo. Naturalmente, antes que nada hay que aceptar su existencia, sino cualquier intento de explicación será totalmente inútil, vamos lo común, una total pérdida de tiempo que a mi me resbala por completo. Si alguien dice que yo soy un intolerante con esto, tiene toda la razón, mi tolerancia al respecto es cero tras cero y sobre cero al respecto. ¿Por qué? la razón es sencilla, yo no puedo otorgar la fe y si tampoco se me deja argumentar del modo en que lo hago y al menos dejo una puerta abierta a la duda, ¿para qué esforzarme en intentar dialogar un sólo minuto con un interlocutor cerrado a todo argumento y que Séneca calificaría como un "hombre ausente"?. Entonces, simplemente soy pragmático y ante este tipo de interlocutores no pierdo mi tiempo. Pero si tengo intención de ir siguiendo el debate, aunque sea por partes.
Y, respecto a Hitchens es que ya en la fecha del debate estaba enfermo, no sé si terminal, pero si tenía una enfermedad realmente grave. Ahora bien, tal como apuntas, ya sabe que Dios existe y que le ha tocado rendir cuentas, y confiemos en la Misericordia Divina.
"He ahí la tragedia. Europa hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma europea choca con una realidad artificial anticristiana. El europeo se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.
<<He ahí la tragedia. España hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma española choca con una realidad artificial anticristiana. El español se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.>>
Hemos superado el racionalismo, frío y estéril, por el tormentoso irracionalismo y han caído por tierra los tres grandes dogmas de un insobornable europeísmo: las eternas verdades del cristianismo, los valores morales del humanismo y la potencialidad histórica de la cultura europea, es decir, de la cultura, pues hoy por hoy no existe más cultura que la nuestra.
Ante tamaña destrucción quedan libres las fuerzas irracionales del instinto y del bruto deseo. El terreno está preparado para que germinen los misticismos comunitarios, los colectivismos de cualquier signo, irrefrenable tentación para el desilusionado europeo."
En la hora crepuscular de Europa José Mª Alejandro, S.J. Colec. "Historia y Filosofía de la Ciencia". ESPASA CALPE, Madrid 1958, pág., 47
Nada sin Dios
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