Sería el colmo que ahora se tenga que demostrar que algo extraño y totalmente inverosímil no ocurrió. Es el historiador el que tiene que demostrar que ocurrieran los hechos que pretende sacar a la luz. ¿Dónde están esas fuentes, falsas o no? Me da igual que el que desmienta el bulo sea liberal, comunista o masón. Hace bien en desmentirlo. Desde luego este Oldaric debe estar a la altura de José Carlos Clemente.