Amigo Paco:
Como bien sabes, TODOS los militares en activo en 1931 juraron fidelidad a la República, pero vista la deriva de ese ente (Re-privada de la masonería, el sectarismo anticatólico y el marxismo) rompieron su juramento (o se desnaturalizaron de su señor, como decían en la Edad Media) con toda la legitimidad moral, porque aquella era una situación límite. Es de suponer -y estoy seguro de ello- que muchos de los que hoy están en nuestras FFAA o en las de Seguridad del Estado, sabrán lo que tienen que hacer llegada otra situación límite como aquella (que está a punto de llegar) Pero ten la caridad cristiana de no comparar la actitud de los peperos que son ciudadanos no ligados profesionalmente al sistema con aquellos que sí lo están volens nolens.
Creo que lo más justo y prudente es no juzgar la conciencia ajena en temas tan delicados e íntimos y ayudar en la medida de nuestras posibilidades a estos hermanos nuestros puestos en un difícil dilema.
"No juzguéis y no seréis juzgados. No condenéis y no seréis condenados" son palabras del más grande de los maestros, nuestro Salvador y Señor Jesucristo.
P.d.: Y desde luego yo soy de los que no trago, te lo aseguro, querido amigo. No te digo más porque no ha lugar contar batallas personales, pero las he tenido muy "gordas" y graves con el Sistema, precisamente por no tragar)
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