Re: Xenofobia vs. xenofilia
Si se observa con cierto detenimiento el lenguaje que se emplea para tergiversar y falsear la realidad, extensión de falacias de todo género de modo interesado y preguntemos a quienes benefician siempre, lo cierto es que la xenofobia es una cuestión religiosa en primer término. Las actitudes xenófobas primarias de la gente no están dirigidas al extranjero dicho en un amplio sentido, sino a un determinado y concreto sujeto: el musulmán.
Cuando leemos en cualquier medio de comunicación de masas que aquí o allá, ha habido un problema racial o xenófobo, casi siempre hay detrás un rechazo a los musulmanes. ¿Quién habla mal de los chinos? por ejemplo, y no son modelo de nada, salvo de laboriosidad (forzosa a veces, pero entre ellos). Buenos ejemplos los tenemos en los comercios chinos, los hay por todas partes y en ellos siempre hay clientes nacionales (aquí hablo de españoles), pero ¿cuántos comercios musulmanes existen? ciertamente los hay, ¿con cuántos clientes nacionales? En la localidad en la que resido ha habido varios comercios abiertos por musulmanes, todos han acabado cerrando. En cambio, hay varios comercios chinos y sólo uno cerró hace tiempo, pero por problemas familiares de sus propietarios. En dicha localidad hay una colonia musulmana significativa, y apenas existe una china que se pueda llamar así.
En general, algo similar sucede con otras etnias, y sólo aparecen problemas puntuales allá donde proliferan más o tienen una mayor concentración. De todos modos, en España la xenofobia ha sido una constante secular con gitanos, agotes, quinquis, etc., rayando en el racismo muchas veces. Y si que existe un marcado racismo español dirigido contra los judíos, siendo buena prueba de ello otra situación también secular, la de los xuetas mallorquines. Se podrían afirmar manifestaciones similares de unas regiones a otras. Hace años en el País Vasco era peor llamar "cacereño" a un individuo que otros epítetos que dan lugar a tortazos. Los mismos desprecios basados en prejuicios negativos siempre, han sido una constante: el "Madrid nos roba" del nacionalismo catalán, es la otra cara de la moneda de "la pela es la pela" de los castellanos contra los catalanes considerados interesados y materialistas. Es por ello una situación muy común, aunque no haya una xenofobia por razones puramente raciales. En otras partes de Europa pasan cosas similares, y es que a ninguna agencia de turismo se le ocurre organizar una excursión en autobús compuesta de viajeros alemanes e ingleses, salvo por desconocimiento o por ganas de enredar las cosas. Los europeos del Norte envidian el Sol mediterráneo y las mujeres morenas, pero los hombres son considerados de rango inferior, y viceversa si hablamos de las nórdicas. Aquí mismo, en Hispanismo.org, hay un hilo abierto bajo el título de "los ingleses son unos borrachos", pero eso qué es ¿prejuicios o una forma de xenofobia?
Vamos que esto es algo así como todos contra todos, menos respecto a los musulmanes, porque en ello hay unanimidad. Luego, es una cuestión religiosa en primer lugar y, consecuentemente, la cultura europea está construida por el Cristianismo, al igual que el Islám ha construido todo el ámbito cultural musulmán. Una u otra de ambas civilizaciones ha de perdurar, la cuestión es cuando se va a producir "el choque de ambas civilizaciones".
"He ahí la tragedia. Europa hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma europea choca con una realidad artificial anticristiana. El europeo se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.
<<He ahí la tragedia. España hechura de Cristo, está desenfocada con relación a Cristo. Su problema es específicamente teológico, por más que queramos disimularlo. La llamada interna y milenaria del alma española choca con una realidad artificial anticristiana. El español se siente a disgusto, se siente angustiado. Adivina y presiente en esa angustia el problema del ser o no ser.>>
Hemos superado el racionalismo, frío y estéril, por el tormentoso irracionalismo y han caído por tierra los tres grandes dogmas de un insobornable europeísmo: las eternas verdades del cristianismo, los valores morales del humanismo y la potencialidad histórica de la cultura europea, es decir, de la cultura, pues hoy por hoy no existe más cultura que la nuestra.
Ante tamaña destrucción quedan libres las fuerzas irracionales del instinto y del bruto deseo. El terreno está preparado para que germinen los misticismos comunitarios, los colectivismos de cualquier signo, irrefrenable tentación para el desilusionado europeo."
En la hora crepuscular de Europa José Mª Alejandro, S.J. Colec. "Historia y Filosofía de la Ciencia". ESPASA CALPE, Madrid 1958, pág., 47
Nada sin Dios
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