Ah, sí, Mons. Reig Plá, la gran esperanza del conservadurismo español. Memorable su actuación en la iglesia de las bernardas, donde estaban las placas que recuerdan a los vecinos caídos por Dios y por España.

Con el supuesto fin de hacer unas reformas estructurales en el edificio, mandó colocar unos andamios que tapaban toda la fachada. Así estuvo varios meses la iglesia, en obras de reforma que teóricamente mejorarían su aspecto. Cuando finalmente retiraron los andamios, ¡magia potagia!, la placa de los caídos había desaparecido. Nadie sabe nada. Nadie da ninguna explicación. La placa se ha esfumado con nocturnidad y alevosía. Con la bendición del que algunos consideran "el obispo más íntegro de España" (por la guerra, también nocturna, que se trae con Francisco I) y de sus palmeros conservadores.

¡Un aplauso para Mons. Reig Plá, el más firme baluarte contra las hordas rojas y la gran esperanza del catolicismo español!