Me gustaría aclarar una cosa.
Es cierto que en mis intervenciones puede parecer que yo reflejo un carácter un tanto obstinado o cabezota en la defensa del geocentrismo. Pero creo que este tema, sinceramente, es de una importancia colosal y capital. Me explico.
Realmente a mi me importaría un bledo que la Tierra rotara o no rotara, que fuera el sol o la Tierra la que se moviera anualmente, que la Tierra estuviera o no en el centro del Universo,...: digo, que no me importaría todo esto y me resultaría completamente indiferente si no fuera porque la Iglesia Católica ha defendido siempre esta posición en base a la interpretación de las Sagradas Escrituras. Todo el tema científico, ciertamente es importante, pero se trata de algo completamente secundario ante la importancia capital de la posición oficial de la Iglesia Católica.
Todo esto que estoy diciendo no es en absoluto baladí. Es importantísimo. ¿Por qué? Pues porque si la Iglesia Católica ha fallado en un asunto en el que de manera ininterrumpida ha venido sosteniendo una postura oficial clara y justificada en cuanto a una determinada interpretación de las Sagradas Escrituras por medio de su Sagrado Magisterio en conformidad con el consentimiento unánime de los Santos Padres...; digo, que si la Iglesia ha fallado en esto, entonces, tal y como razonan lógicamente los enemigos de la Iglesia, también podría fallar en todo lo demás en lo que la Iglesia ha mantenido una posición igual a lo largo de los siglos (por ejemplo: no ordenación de las mujeres, condenación del aborto, condenación de la homosexualidad, etc...).
No se trata del error en el que caen los conservadores que dicen que todo lo que sale de la boca de los Papas ha de considerarse como palabra de Dios. Aquí no estamos hablando de tal o cual opinión coyuntural o circunstancial de tal o cual Papa. Aquí estamos hablando de una ininterrumpida doctrina que ha sido defendida y promulgada de manera constante a lo largo de todos los siglos por la Iglesia respecto a una interpretación auténtica de las Sagradas Escrituras (unanimidad de los Santos Padres, conformidad de casi todos los teólogos medievales, Decretos continuados de diferentes Papas y confirmados por ellos mismos de las Sagradas Congregaciones del Índice y del Santo Oficio y jamás abrogadas o revocadas, etc...).
No sé si he conseguido transmitir a los foreros y lectores algo de la importancia fundamental de todo este asunto. Pero es que así. Y esto no tiene nada que ver con que yo sea un retrógado que no quiere para nada el progreso de la técnica y de la tecnología y de la ciencia. Nada de eso. ¡Claro que son muy buenas las máquinas y son muy útiles para las personas y para la sociedad! ¡Claro que está muy bien todo este auténtico progreso técnico! No soy maniqueista.
Pero todo este progreso no tiene nada que ver con que el geocentrismo haya sido demostrado como falso. ¡Eso es una completa mentira! El texto de Quintilla que puso Valmadian sobre "El mito de la Ciencia" nos puede ayudar a entender esto que estoy diciendo: una cosa son los fenómenos y los datos empiricos observados que nadie discute. Todos estos datos son muy buenos y cuantos más datos se recopilen mejor. Pero otra cosa distinta es la interpretación que se dé a esos datos (datos empíricos que, repito, todo el mundo acepta y nadie discute). Es en la interpretación en donde está la clave del asunto y, ahí, como bien decía Quintilla, nos enfrentamos a un asunto estrictamente filosófico en donde los prejuicios, las fobias, las cosmovisiones, etc..., juegan el papel auténticamente preponderante a la hora de decidirnos por una u otra interpretación de ese fenómeno o dato empírico común que nadie discute.
Espero que con este mensaje haya podido aclarar a Valmadian, a los foreros y a los demás lectores la razón fundamental de la posición que defiendo. Creo que, en conciencia, estaba obligado a dar esta explicación.
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