No. Lo que yo quiero decir es que la política llevada a cabo durante el franquismo fue OBJETIVAMENTE MALA. Y que, por lo tanto, para poder realizar una auténtica regeneración-restauración social de la comunidad política española debería hacerse una política diametralmente distinta a la realizada durante aquella dictadura.Yo no he dicho en ningún momento que usted y yo compartamos la misma visión de lo que debería de entenderse por bien común. Solamente he dicho que España durante el franquismo vivió una época de paz y justicia social tan grandes y duraderas, que aún estamos siendo beneficiados por sus réditos. Y que por eso en España se podía decir todavía que una persona de clase media vivía muchísimo mejor que un homólogo suyo en Norteamérica
Franco sólo fue el instrumento o herramienta de los organismos masónicos mundiales para la implantación en suelo español de las exactamente las mismas políticas tecnocrácticas-planificadoras que paralelamente se estaban realizando en el resto de países del entorno occidental, bajo la común dirección del Fondo Monetario Internacional y del Banco Internacional de Reconstrucción y Desarrollo (integrado en el Banco Mundial).
¿Cree usted que todas estas críticas a las políticas tecnocráticas en materia económico-social son gratuitas e injustificadas? ¿Cree usted que no son más que una pura opinión personal mía carente de justificación en la realidad? ¿Cree usted que todas las brillantes plumas que criticaron esto mismo que yo crítico en la década de los ´60 y ´70 en torno a la revista Verbo y la Ciudad Católica estaban injustificadas y no eran más que unos "antifranquistas" irracionales? ¿Cree usted que estaban equivocados todos los autores franceses de la Cité Catholique que criticaban esas mismas políticas tecnocráticas del franquismo que se aplicaban también de manera calcada en Francia durante la misma época? ¿Cree uste que se equivocaban Dietrich von Hildebrand o Josef Pieper cuando realizaban la misma denuncia de esas mismas políticas en Estados Unidos y Alemania respectivamente? ¿Cree usted que se equivocaban los italianos católicos tradicionales que criticaban la misma política que estaba implantando la democracia cristiana (es decir, el paralelo de la dictadura franquista) en Italia? ¿Cree usted que estaban equivocados C. H. Douglas y sus discípulos del Crédito Social cuando también denunciaban públicamente todas esas mismas políticas que el Partido Laborista estaba desarrollando e implantando en la isla británica en la misma época?
Desde luego que tenemos dos visiones contradictorias de lo que significa el bien común, si usted considera que todas esas políticas paralelamente implantadas en los países occidentales bajo la común dirección de los Organismos Mundiales masónico-financieros (en el caso español, implantadas por los tecnócratas democristianos a partir del gobierno del ´57) constituyen una genuina política favorecedora del bien común.
Posdata. No entiendo a qué viene esto de arrojarme en cara el libro de Ángel López-Amo "El poder político y la libertad (La Monarquía de la reforma social)" ¡Narices! Si precisamente le llevo insistiendo a usted desde hace varios días la lectura del último capítulo conclusivo de este libro de im-pres-cin-di-ble lectura, y que yo le transcribí precisamente para usted personalmente hace varios días, como intento de hacerle entender dónde radica realmente la verdadera y auténtica regeneración-restauración social española.
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